Al hilo de lo que comentaba el otro día nuestra compañera Luz García en relación a la visión ofrecida por los cuentos tradicionales, quisiera recomendarles un cortometraje que, a pesar de que puedan conocer muchas de las personas que lean este blog, vale la pena ver una y otra vez. En poco más de seis minutos se nos ofrece un irónico retrato acerca de la asignación de roles en función del género (masculino o femenino). No olvidemos que, cuando pequeños, el ser hombres o mujeres nos obligará a adoptar determinadas actitudes, elegir ciertos juegos y, más tarde, sentirnos atraidos por personas del sexo opuesto. Pero... ¿qué pasa cuando no es así? La mentalidad tradicional tachará automáticamente a estos niños o niñas de rarit@s. Es posible que incluso los pertenecientes a una sociedad menos conservadora caigan en la misma trampa...
Dejo en el aire estas preguntas y os animo a ver el corto. ¿Qué pensáis de lo que en él pasa?
Es un corto muy interesante porque denuncia el tópico a la inversa, precisamente para que se note lo absurdo de educar sin contar con los niños, a la contra (a la fuerza) a favor (también a la fuerza). Suele ser más frecuente la primera, por eso hará recapacitar...o eso espero.
ResponderEliminarMira qué noticia he leído hoy:
http://www.diariovasco.com/20091105/alto-urola/igualdad-plantea-impulsar-cambio-20091105.html
Exacto. Porque incluso el espectador puede incluso plantearse la misms posibilidad que la madre, aunque repruebe su actitud...
ResponderEliminarAcerca de la noticia, me parece una interesante propuesta, pues no plantea que los hombres aprendan "cosas de mujeres" sino al contrario, lo que resulta menos común